Cuidado con los CFDs

@Hugo Ferrer  25/10/2012  

Hace poco estuve hablando de lo increíblemente caros que son los brókers españoles con respecto a otros brókers extranjeros. Hicimos comparaciones y vimos que había brókers españoles que por algunas operaciones nada exóticas podían llegar a cobrar hasta 25 veces la comisión de otro bróker extranjero en el que, por cierto, no es nada difícil abrir cuenta.

Normalmente, todo lo que sea un banco, tipo Santander, Bankinter, etc… son especialmente caros para operar. Después hay otros brókers que solo se dedican a la intermediación pero, en mi opinión, siguen siendo muy caros. Desde luego, tienen precios más competitivos, pero las comisiones mínimas a pagar son una barbaridad. Alguien me decía que para "jugar" en bolsa estaban bien. Y no puedo más que darle la razón. Si lo que desea es jugar y divertirse un rato, esos brókers están bien. Igual que cualquier casino está bien. Ahora, no es adecuado para aquél que se toma los negocios bursátiles de otra manera. No digo de forma profesional, pero sí al menos con un poco de seriedad.

Y después hay una tercera categoría de "brókers" (lo de las comillas es intencional) que son una serie de casas de apuestas que podrían asemejarse a las ‘bucket shops’ en las que operaba el legendario Jesse Livermore a finales del siglo XIX y principios del XX. Estas casas directamente no ofrecen la intermediación en ningún instrumento serio como acciones, futuros o bonos. Lo que ofrecen son, habitualmente, CFDs o contratos por diferencias, que es la forma más rápida de perder todo tu dinero. ¿Por qué?

1) A causa del apalancamiento excesivo, que no es un problema en sí mismo, pero la gente que usa CFDs lo exprime al máximo

2) A causa de la continua estafa que suponen las ganancias del "bróker" mediante el diferencial de la horquilla (‘bid-ask spread’).

3) A causa de la sistemática "voladura" de posiciones de los clientes cuando le interesa al "bróker" o de "inesperados deslizamientos a la hora de la compra venta".

4) A causa de que el "bróker" o "bucket shop" está interesado en la pérdida del cliente.
Normalmente estas ‘bucket shops’ se presentan como libres de comisiones.


 
A este tipo de brókers "sin comisiones" les llamo los "brókers místicos". Porque desde Catalina de Siena, que estuvo 8 años sin comer ni beber o, desde Rosa María Andriani, que llegó a los 28 años sin hacer ambas cosas, la civilización occidental no había conocido entidad física o jurídica que solamente de aire se sustentara.

Pero la ficción o mitología se hizo realidad y ¡no cobran comisiones! No, por favor, no se lo crean. Hablando de santos recuperemos estas palabras del evangelio de San Mateo que vienen muy adecuadas al momento:
"Cuídense de los falsos profetas: se presentan ante ustedes con piel de ovejas, pero por dentro son lobos feroces. Ustedes los reconocerán por sus frutos. ¿Cosecharían ustedes uvas de los espinos o higos de los cardos? Lo mismo pasa con un árbol sano: da frutos buenos, mientras que el árbol malo produce frutos malos. Un árbol bueno no puede dar frutos malos, como tampoco un árbol malo puede producir frutos buenos. Todo árbol que no da buenos frutos se corta y se echa al fuego"

La realidad, como siempre echando mano de la Ley de la Paradoja, es que estos "brókers" -o mejor dicho "bucket shops"- son por definición caros en todos los sentidos posibles (se suele decir que "lo barato sale caro"). Pero su problemática no acaba en que sus comisiones ocultas son altas, además se da la circunstancia de que estos "brókers" de CFDs no son unos simples intermediarios, sino que en realidad son su contrapartida y juegan contra usted.

Así que, además de "no cobrar", le dan las cartas marcadas "pero no hacen trampas" porque "son sus amigos".
Vamos por partes ¿Por qué "no cobran comisión"?

Es completamente falso que no cobran comisión, solo que lo hacen de una forma diferente. En vez de decirle a usted que comprar acciones de Santander vale 0,2% por operación, le dicen que es gratis pero la realidad es que le "aumentan la horquilla". Así, si en el mercado regulado la mejor demanda es 10,05 y la mejor oferta es 10,10, ellos no le ofrecerán el CFD basado en esos valores públicos, sino que un CFD siempre viene con una horquilla ampliada. Pongamos que en la práctica comprar esos CFDs es como comprar y vender la acción del Santander a 10,00 y 10,20 ¿ve? Dónde antes la horquilla era 0,05 ahora es 0,20, lo que representa una diferencia de 0,15 que se lo gana el "bróker que no cobra". Esto es una vergüenza y su publicidad completamente engañosa.

Pero esta no es la parte mala, al fin y al cabo comisiones caras cobran todos los brókers españoles. La parte mala de verdad, es que los CFDs son como los casinos de mala muerte no regulados donde usted juega contra quien tiene las cartas marcadas. Por supuesto, es tan increíble, ¡que no se puede creer! No estamos hablando de instrumentos financieros como los futuros que cotizan en un mercado público, con un contrato estándar, una cámara de compensación central y donde la información queda registrada "con luz y taquígrafo". En el caso de los CFDs, un broker de mala muerte le dice a usted "vamos a hacer una apuesta privada, si usted compra este CFD y el índice sube yo le pago, si baja, usted me paga". Y eso es todo. Justo en apariencia ¿verdad?

Veamos la realidad:
El "bróker" de CFDs, que sabe donde están todas y cada una de las órdenes de sus clientes, cuando vea que si hace subir o bajar ligeramente el mercado que él mismo ha creado con su clientela, puede hacer saltar las órdenes ‘stop loss’ o de inicio de posiciones según lo que más le convenga, ¿usted qué cree que hará?

Como ya sabemos que estas "bucket shops" no se nutren del aire como Catalina de Siena y que, además, todos esos empleados del "bróker" cuestan dinero, pues lógicamente el "bróker" le hará saltar su operación, le "reventará" su ‘stop loss’ o hará que su orden limitada salte, para después continuar siguiendo al mercado de futuros. Es decir, como ellos son los que "crean" el CFD para usted, ellos son el mercado o "lo hacen" y por eso se les llama "market markers". Sí, el CFD es una apuesta sobre un subyacente, que no suele ser un índice sino el futuro de un índice. Pero eso no significa que el CFD deba seguir al milímetro lo que hace el futuro. Puede haber "pequeñas desviaciones" que casualmente hacen saltar las operaciones que le interesa al "bróker". Porque, desde luego, en usted no van a pensar. Al revés, saben que quienes operan CFDs lo pierden todo y cuanto más rápido le despojan de su capital, mejor, que los bonus se pagan cada año.

Pero todavía hay más. No es que sean caros y ellos manejen su mercado de CFDs a su antojo. La realidad aún es peor: no existe un mercado de CFDs, ni siquiera el que ellos teóricamente fabrican. Por supuesto, es tan increíble que no se puede creer. Ellos, sí, le dan contrapartida en una apuesta sobre que algo suba o baje. Pero ¿usted qué piensa? ¿qué ellos cubren su riesgo yendo al mercado de futuros a cubrirse ante la eventualidad de que usted gane?

No me haga reír. Los CFDs son el producto estrella para las personas más inexpertas que llevan poco tiempo en los mercados. Y como saben eso, saben que la probabilidad de que cada uno de sus clientes pierda todo su dinero en unos meses es cercana al 100%. Sí, casi 100%. Directamente, esperan sentados a que el novato que usa estos instrumentos se arruine hasta quedarse con todo su dinero. La comisión no es el beneficio de estos "brókers". El beneficio de ellos es su pérdida. El "bróker" ni es su amigo, ni un intermediario neutral como debería ser un bróker decente. Estas "bucket shops" son directamente su peor enemigo y si ha operado con CFDs le puedo asegurar que le están timando sistemáticamente.

Tal es así, que la ASIC, es decir, "la CNMV australiana", menciona en su sitio web oficial que las apuestas con CFDs tienen más riesgo que las apuestas de caballos o los casinos, ya que mientras en las apuestas de caballos y casinos solo se puede perder lo apostado, con los CFDs puede perder hasta su casa. ¿Cómo? Imagine que mañana un loco ataca una torre en un país desarrollado y declara la Yihad islámica y que el mercado al día siguiente abre un 5% más abajo. Si usted va apalancado hasta los dientes es probable que pierda su cuenta y que, además, le deba mucho dinero al "bróker"...que no es su amigo y le hará pagar.

 

 ¡Oye! pero olvidemos que es una forma carísima de acceder al mercado, que el "bróker" sabe perfectamente cuáles son tus cartas y que, además, no hay mercado, si no que se están partiendo de risa mientras te ven perder. ¡Olvidémoslo! ¡porque es gratis! ¡gratis! ¿oíste bien? totalmente gratis.

Y las ovejas van juntas al matadero

Aparte de Australia y Reino Unido, dos países con alta cultura financiera, los CFDs están permitidos en Europa pero no en EEUU. Y hay que tener en cuenta que en EEUU están permitidas muchas "armas de destrucción masiva" en palabras de Buffett. Pero, curiosamente, los CFDs están prohibidos. Como tienen experiencia de finales del siglo XIX y principios del XX con las "bucket shops", han decidido, sabiamente, no caer en el mismo error. Por otro lado, Australia ha creado un extraño mercado público de CFDs, con lo cual es caso aparte. Y los británicos, bueno, siempre han conducido por la izquierda.

Mi consejo: no operen en un bróker de CFDs o en un bróker de Forex en donde le digan que "operar es gratis" y donde "le aseguren la horquilla" porque esos son dos signos inequívocos de que usted está operando en una ‘bucket shop’, donde las probabilidades de ganar son casi 0. Promesa.
Y mi pregunta es ¿dónde están los organismos que debería velar por la integridad de los mercados financieros?

Se les escaparon las Afinsas, los Forum filatélicos, las gescarteras, las rumasas, las preferentes y ahora se le están escapando estos intentos de brókers que tanto daño están haciendo al panorama financiero en España. ¿Es moral permitir que haya "establecimientos" donde es más difícil ganar que en los casinos? ¿No debería haber un escrupuloso examen del candidato a ‘trader’ para ver si está en sus facultades el operar con estos productos? No olvidemos que, con las preferentes, muchos eran analfabetos y se les hacía firmar documentos incomprensibles para cualquiera. Pues aquí, muchas personas bien educadas e inteligentes que desean iniciarse en los mercados, están siendo engañadas por una especie de analfabetismo muy extendida en el mundo hispanoamericano: el analfabetismo financiero.

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Traducido con "Traductor de Google", tomado de Wikipedia en inglés y modificado ligeramente por mí para hacerlo un poco más entendible:
Según la definición de la Corte Suprema de los EE.UU. una tienda "bucket shop" es "un establecimiento, nominalmente para la operación de un negocio de cambio de valores o negocios de carácter similar, pero en realidad para el registro de apuestas, por lo general en pequeñas cantidades, en la subida o caída de los precios de las acciones, granos, aceite, etc, y en donde no hay transferencia o entrega de las acciones o materias primas que nominalmente se negocian. Una tienda "bucket shop", podría explicarse mejor como un lugar donde la gente va a hacer "apuestas paralelas" -similar a un corredor de apuestas-.

"Bucket shop" es un término definido en la legislación penal de muchos estados de los Estados Unidos, que consideran delito operar en este tipo de establecimientos. Normalmente, la definición de la ley penal se refiere a una operación en la que se vende el cliente lo supone que es un interés derivado en un futuro la seguridad o la mercancía, pero no hay ninguna transacción realizada en cualquier bolsa. La transacción va "a ninguna parte" "y nunca se ejecuta. Sin una operación subyacente real, el cliente está apostando contra el operador de tienda "bucket shop", que no participan en el mercado. O dicho de otra manera, el dueño de la "bucket shop" literalmente hace de banco, como en una casa de juego, donde se apuesta contra el cliente".

Una persona que participa en la práctica se conoce como un ‘bucketeer’ y la práctica se refiere a veces como ‘bucketeering’.

Vía:http://www.cotizalia.com/opinion/opinion-contraria/2012/10/25/cuidado-con-los-cfds-7598/