Aurelio Jímenez 2 de octubre de 2012
Recientemente recibimos un correo electrónico de un lector de El Blog Salmón en el que nos alertaba sobre un aspecto que considero indignante en la nueva reforma educativa: la pérdida de peso de la asignatura de Economía en bachillerato. He de reconocer que cuando leí el email dudé y no creí que eso pudiese ser cierto, máxime si tenemos en cuenta la actual coyuntura económica de nuestro país. Sin embargo, tras investigar un poco y echar un vistazo al anteproyecto de la Ley de la Mejora de la Calidad de la Educación (LOMCE) me he quedado estupefacto.
Decisiones como esta sólo demuestran la incapacidad manifiesta de quienes han redactado una reforma educativa que era necesaria pero que nuevamente responde exclusivamente a intereses políticos y no a lo que la sociedad necesita. Y es que es curioso que desde los primeros párrafos de la LOMCE se hable de conceptos como el mercado global, la competitividad de un país o el acceso a los puestos de trabajo de alta cualificación, en un intento por darle un sentido económico a la nueva reforma que justifique su implantación.
No señor, nada de eso. Por un lado se les llena la boca de justificaciones económicas y por otro dan una bofetada a la educación en finanzas de los alumnos. Incluso se atreven a hacer referencia a estudios internacionales como las pruebas PISA, donde los alumnos españoles son evaluados de competencias financieras sin tener ninguna preparación específica previa al respecto.
No señor, nada de eso. Por un lado se les llena la boca de justificaciones económicas y por otro dan una bofetada a la educación en finanzas de los alumnos. Incluso se atreven a hacer referencia a estudios internacionales como las pruebas PISA, donde los alumnos españoles son evaluados de competencias financieras sin tener ninguna preparación específica previa al respecto.
Y es que no solo han hecho caso omiso a las recomendaciones de la OCDE, la UE y parte del profesorado y de la comunidad educativa de implantar una asignatura vinculada con la economía en los cursos de la ESO. Además, han relegado a la Economía de Bachillerato a un plano secundario, condenándole a su desaparición y privando a nuestros hijos de conocer términos como la balanza de pagos, el PIB, el déficit público o el tipo de interés. Total, ¿para qué?
De asignatura de modalidad a optativa secundaria
Les explico: hasta ahora la asignatura de Economía era una asignatura de modalidad en el bachillerato de Ciencias Sociales. Posiblemente, se trataba de la asignatura con más peso y que más sentido daba al mismo, pues muchos alumnos optaban por esta rama de bachillerato para posteriormente iniciar estudios universitarios relacionados con las finanzas.
Con la LOMCE, la asignatura de Economía de primer curso de bachillerato deja de considerarse una asignatura propia de la modalidad para convertirse en una optativa del último escalón, sustituyéndose por Literatura Universal. De esta forma, queda de manifiesto la torpeza de quienes han redactado un anteproyecto de reforma educativa cuyo fin es incrementar la ignorancia sobre aspectos económicos del alumnado.
Por más que lo intento no alcanzo a comprender la justificación de esta barbaridad. Han tenido la oportunidad perfecta para implantar la materia de Economía en la ESO y de esta forma educar a los chavales en finanzas desde edades tempranas, pero no sólo no la han aprovechado, sino que además han decidido crucificar a la asignatura con mayor seña de identidad del bachillerato de Ciencias Sociales.
Wert debe dimitir
Señor Wert, un ministro de Educación que niega la educación en finanzas a los jóvenes de un país con más de cinco millones de parados y una tasa de desempleo juvenil superior al 50 % debe dimitir de su puesto de inmediato. Las grandes decisiones que nos afectan en nuestro día a día no deben ser tomadas por ineptos, sino por personas con cualificación y ganas de trabajar por y para mejorar el futuro de su país.
Las reacciones a esta medida no se han hecho esperar. Quizás una de las que pisa con más fuerza sea la iniciada por la Confederación Estatal de Asociaciones de Profesorado de Economía en Secundaria (CEAPES), que ya se encuentra tramitando alegaciones al anteproyecto de LOMCE y que van a iniciar una campaña pública con el fin de denunciar esta situación. Ojalá lleguen a buen puerto, por el bien de los chavales de este país.
Por cierto, como muchos ya sabréis por mi BIO, soy profesor de economía en bachillerato.
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