La convivencia es difícil y todo lo que parece de color de rosa en un inicio, a muchas parejas se les marchita. Pero algunas parejas son capaces de mantener el entusiasmo, superar la adversidad, tener complicidad y estar unidos a pesar de los años.
A pesar de la dureza laboral por la que atravesamos, hay personas que siguen insistiendo y se desaniman menos que otros. Otros son capaces de cambiar el chip y buscar trabajo en áreas en las que, de no pararse a pensar y buscar, nunca hubieran buscado. Y otros, los más valientes, deciden salir fuera, conocer qué se está haciendo, traerlo a su ciudad y emprender, depender de ellos y volcar todo su entusiasmo en el nuevo proyecto.
Dicen que los amigos de toda la vida son esos que uno conserva desde el colegio y la universidad. Pero el trabajo, la familia y las circunstancias personales muchas veces nos separan de esas personas tan importantes. La distancia y el tipo de vida que empiezas a llevar como adulto no siempre nos separan, porque muchos se esfuerzan para que esto no ocurra.
Las malas experiencias te dejan huella, condicionan incluso algo tan valioso como tu escala de valores. Las personas que han sufrido intentan protegerse a toda costa para no volver a tropezar con la misma piedra. A veces se vuelven tan cautelosos que condicionan su vida, perdiendo oportunidades, se vuelven rencorosos y juzgan a todos como si fueran los causantes de sus desgracias. Otros, por suerte, han sabido perdonar, olvidar y vivir de frente.
No hay situación más humillante que verte atacado por otra persona, tanto física como psicológicamente. El maltrato, la degradación y el sentirte ridículo machaca por completo tu autoestima. Volver a sentirte una persona completa, capaz y con seguridad se convierte en una tarea importantísima después de sufrir este tipo de experiencias.
Las peleas entre hermanos son un motivo frecuente en la consulta. Los padres viven esta situación con muchísimo estrés, algunos incluso llegan a separarse porque no comparten la forma de educarles.
Las separaciones son un estado civil que está al orden del día. La familia, que antes estaba representada por un padre, una madre y unos hijos, ha pasado a tener apellido: ahora se llama familia tradicional. Porque en estos últimos veinticinco años han surgido nuevos modelos de familia, ni mejores ni peores, adaptados a las circunstancias. Modelos de familia que también traen felicidad y una oportunidad a las personas que antes no podían tener el proyecto que deseaban.
¿Cómo sería el mundo si, por ser heterosexual, te señalaran con el dedo? ¿A ti te gustaría sentirte diferente? A nadie le gusta sentirte señalado, ni menospreciado, y menos aún humillado y ninguneado por su orientación sexual. Hay muchas personas que han sufrido no por el hecho de enamorarse de personas del mismo sexo, sino porque a otros trogloditas les ha dado por juzgarles e insultarles.
Pasamos en el trabajo más tiempo que en nuestro hogar, y convivimos con compañeros y jefes. Entre todos deberíamos facilitar la convivencia, la comunicación y conseguir que el ambiente de trabajo sea agradable, que te apetezca ver a tus compañeros y tener ganas de trabajar. Los equipos deportivos nos llevan una gran ventaja en este sentido, habría que aprender de ellos.
¿Habrá algo más gratificante y apasionante que tener un sueño y que tu trabajo y esfuerzo permitan que se convierta en realidad? No, no lo hay. Cuando te conviertes en tu propio motor, cuando aprendes a autodirigirte y a sacar lo que llevas dentro de ti para alcanzar lo que deseas, entonces, tocas la plenitud.
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