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3 de septiembre de 2013

Déficit de Tarifa, 13 años las eléctricas estafando al país

La trampa de la Reforma Eléctrica

Desde que se publicó el RDL 9/2013 más conocido como la Reforma Eléctrica, van saliendo a la luz cada vez más aspectos que indicarían que se ha producido un fraude masivo en el sistema eléctrico español, un sistema regulado. El objetivo de este decreto es atajar lo que se denomina Déficit Tarifario, iniciado por Josep Piqué en el año 2000 y dar estabilidad al sistema eléctrico español y evitar una escalada de precios en la tarifa eléctrica.
Sin embargo, bajo esos intereses generales se esconde el mayor escándalo de la democracia española. El real decreto no ataja las causas reales del Déficit Tarifario y por contra es aprovechado para cargar contra las energías renovables y afianzar el régimen monopolista del mercado eléctrico español.
Iberdrola ha escrito el RDL 9/2013
El primer punto a tratar es saber quien ha auspiciado la reforma eléctrica. Curiosamente términos como “peaje de respaldo”, “rentabilidad razonable de las energías renovables”, “incremento necesario de los costes fijos del sistema”, términos que aparecen como nuevos en la nueva Reforma Eléctrica, han sido acuñados previamente por la Eléctrica Iberdrola.
En el video al que se accede por el enlace “pinchar aquí” (la charla empieza a partir del minuto 30) se ve una charla en la que el señor Gonzalo Sáez De La Miera, Responsable de Prospección Regulatoria de Iberdrola Renovables, en el año 2012, un año antes de la Reforma Eléctrica acuña los términos antes mencionados. Si no fuera por la fecha en la que el Responsable de Iberdrola dio la charla, en la Feria GENERA, se diría que está explicando la reforma energética.
Una vez que ya sabemos cómo se auspició la Reforma Eléctrica, y quién es el responsable de la misma, la compañía Iberdrola, vamos a analizar cómo se llevó a cabo.
En un país serio, esta relación entre el Gobierno y una eléctrica como Iberdrola como mínimo se investigaría. Aquí… no.

Aseveración a comprobar: “El Estado español tiene un gasto público excesivo”

31 agosto 2013
Eduardo Garzón – Consejo Científico de ATTAC España
Especialmente a raíz de la reciente crisis fiscal del Estado español, se suele afirmar que la administración pública gasta demasiado.
Planteamiento
El Estado español, que viene presentando en los últimos años elevados déficits fiscales, presenta un gasto público excesivo que debería reducir si no quiere acabar en quiebra. El gasto público hay que reducirlo hasta que sea cubierto por los ingresos fiscales con el objetivo de suprimir o reducir a su mínima expresión el déficit presupuestario.
Verificación
Los datos (1) demuestran que el porcentaje de gasto público sobre el PIB para el caso español es de los más bajos de toda la Unión Europea de los 27. España tiene un gasto público de un 45,2% sobre el PIB (situándose en el puesto número 17 de 27 países), toda vez que la media de la Unión Europea de los 27 es del 49,1%, existiendo países como Francia que presentan un 56% sobre el PIB o Eslovenia con una cifra del 50,7%.
Gasto-público
Si el gasto público español está por debajo de la media de los 27 países de la Unión Europea, y además está situado en el puesto 17º, podemos concluir con convicción que el Estado español no tiene un gasto público excesivo.

¿Por qué los bancos no prestan dinero a familias y a empresas?

26/8/2013 - Eduardo Garzón
La mayoría de las economías desarrolladas están en recesión. Esto quiere decir que la actividad económica es muy baja: la mayoría de las empresas no invierten sino que desinvierten (expulsan trabajadores, se deshacen de maquinaria y de locales, echan el cierre, etc), la mayoría de las familias no consumen sino que ahorran lo poco que ganan, y el sector público –a pesar de ser el único que podría impulsar la actividad económica mediante la inversión pública– no hace sino reducir su actividad. En consecuencia, el dinero no circula por la economía y esto en un sistema capitalista supone elevados niveles de desempleo y de pobreza.
Si fluyese el dinero la cosa cambiaría: las familias podrían consumir más, las empresas podrían invertir más (contratando, comprando maquinaria…), el sector público invertiría más, etc (1). Por esto mismo uno de los objetivos declarados de los gobernantes es que el dinero vuelva a fluir por buena parte de los poros de la sociedad. El problema es que hoy día, tal y como están configuradas nuestras instituciones económicas –y concretamente desde que suprimieron la banca pública–, la única forma de que haya más dinero en circulación es contando con la actuación de la banca privada. Como se explicó en este artículo, el banco central hoy día no tiene forma de transferir dinero a los agentes económicos, sino que primero se lo transfiere a los bancos privados, y luego éstos se lo transfieren al resto de agentes (y en el camino multiplican esa cantidad creando dinero bancario). Como ya se sabe, este dinero es transferido en forma de préstamos y con unos intereses añadidos que es al fin y al cabo la forma con la cual los bancos hacen negocio (2). Los bancos centrales disponen de una serie de mecanismos (leer este artículo para conocerlos) mediante los cuales intentan influir en el comportamiento de los bancos privados y lograr que faciliten más o menos préstamos a las familias y empresas. Desgraciadamente desde que estalló la crisis estamos viendo que estos mecanismos no están funcionando: los bancos privados continúan sin conceder créditos a pesar de los intentos por parte del Banco Central Europeo. ¿Por qué ocurre esto?
Podemos clasificar los motivos más importantes de la siguiente forma:
1)      El dinero que están recibiendo los bancos privados (por parte del Banco Central Europeo) está siendo utilizado para tapar sus agujeros. Si los bancos privados estuviesen saneados y no tuviesen problemas de solvencia, tal vez prestarían ese dinero a familias y empresas. Lo que ocurre es que estas entidades de crédito tienen muy maltrechos sus balances (debido a sus excesos durante el boom económico y financiero) y por lo tanto aprovechan el dinero que reciben para sanearlos. Utilizando un ejemplo ilustrativo: carece de todo sentido darle agua a una persona que está a punto de morir de sed para que la ceda a otras personas y confiar en que no se la beberá antes.

2 de septiembre de 2013

"Muchos de los que mandan son posibles psicópatas"

27/3/2012 - Paula Delgado Labrandero
La estadística demuestra que el 4% de los líderes empresariales son psicópatas, lo que se traduce en que este trastorno de la personalidad es cuatro veces más frecuente en las altas esferas. "Esto demuestra que el capitalismo se está convirtiendo, poco a poco, en una forma de psicopatía". El periodista británico Jon Ronson, conocido por sus trabajos de investigación en el periódico The Guardian pero sobre todo por su libro Los hombres que miraban fijamente a las cabras –adaptado al cine en 2009 por George Clooney–, vuelve a cobrar protagonismo poniendo en tela de juicio la salud mental de los políticos y directivos de grandes empresas en su quinto libro.
¿Es usted un psicópata? (Ediciones B) relata la historia de un preso que supuestamente fingió una enfermedad mental para obtener una sentencia más leve, pero que sigue ingresado en un penal psiquiátrico porque ningún médico cree que esté cuerdo. Fingir una enfermedad y que te crean dificulta sobremanera volver a convencer de que se está cuerdo. "El que finge estar loco acaba obsesionado con dejar de parecerlo: no sentarse como un loco, no reírse como un loco... Por lo que acaba volviéndose loco de verdad", asegura el autor a El Confidencial.
Ronson explica que la historia personal de una amiga le impulsó a profundizar en el tema de la locura y por ende a escribir el libro. Mary se casó con un hombre que había conocido por internet y le dijo que trabajaba para la CIA. Tras siete años de matrimonio, Mary descubrió que cuando le decía que estaba en una misión secreta en Palestina, realmente estaba dos calles más abajo liado con su vecina. Y es que el psicópata es el mejor mentiroso porque no hay nada que le detenga. "No tiene remordimientos, no siente empatía, no se siente avergonzado... Así que no tiene ninguna razón para ser buena persona". Recuerda que cuando estaba investigando su historia habló con un psiquiatra que fue el primero en revelarle que las altas esferas están llenas de personas con estos rasgos, que son los causantes de la situación actual del mundo. "Y la mera sugerencia de que un trastorno mental sea tan poderoso y pueda causar este desastre mundial me fascinó", reconoce. 
El test de Hare, clave para diagnosticar la psicopatía

¿Por qué Washington y Londres quieren atacar a Siria?

A pesar de lo que veo y leo estos días sobre lo que pasa en Siria, mi confusión sigue siendo dolorosa y no llego a entender desde aquí y siendo un neófito en asuntos de guerra, cual es realmente el problema de tanta sinrazón. Sospecho y me imagino cosas, pero no quiero caer en la torpeza de decir algo de lo que me tenga que arrepentir. 
De todo lo leído y de todas las conclusiones que he podido sacar –seguramente equivocadas, por eso mismo no quiero opinar sobre algo que desconozco-, ésta, sea quizás, una de las que más me han convencido; dejando a un lado, y sin que por eso sean importantes también, las religiones y los conflictos que ya de por si hay en la zona.

28/8/2013


Los mercados han iniciado un nuevo período de liquidaciones con las malas noticias que provienen de Siria y la amenaza de una intervención conjunta de Washington, Londres y París contra el régimen de Bashar Hafez al-Assad. Aunque no existe ninguna prueba de que fue el régimen sirio el que provocó la muerte por armas químicas de 355 personas, ya Estados Unidos ha dictado sentencia y culpa a al-Assad de atentar contra su propio pueblo. Con esto, Obama sigue los pasos de su predecesor en las contiendas bélicas del Medio Oriente, y así como Bush aseguró que en Irak habían armas de destrucción masiva, ahora Obama (premio Nobel de la Paz) señala que Siria tiene armas químicas, sin que exista ningún informe que lo demuestre. 

1 de septiembre de 2013

El movimiento ecologista y la defensa del decrecimiento

Artículo publicado por Vicenç Navarro en la columna “Dominio Público” en el diario PÚBLICO, 29 de agosto de 2013
Este artículo aplaude el movimiento ecologista progresista (no malthusiano), pero alerta de voces anticrecimiento que pueden significar una evolución negativa en el desarrollo de los países. Una cosa es cambiar el tipo de crecimiento, lo cual es necesario, y otra ver como necesario eliminar el crecimiento.
Desde sus inicios, el movimiento ecologista ha tenido dos vertientes o versiones. Una asume que el mayor problema que tiene la humanidad debido al deterioro del medioambiente se debe al crecimiento demográfico que, al generar el consumo de más y más recursos, llegará a determinar un deterioro total del medioambiente, que será inhabitable.
El autor más conocido de esta versión (que fue homenajeado por el gobierno de la Generalitat en 2009), que podríamos llamar malthusiana, es Paul Ehrlich que terminaba su famoso libro The Population Bomb con este párrafo “La causa más importante del deterioro ambiental a nivel mundial es fácil de ver. La raíz del problema es que cada vez hay más coches, más fábricas, más detergentes, más pesticidas, menos agua, demasiado dióxido de carbono, resultado de que hay demasiada población en el mundo”.
De esta explicación de la crisis medioambiental, Paul Ehrlich deriva su propuesta de solucionarla centrándose en controlar el tamaño de las poblaciones e intentar reducir su crecimiento. Esta versión aparece de muchas maneras y con distintos matices. Suele ir acompañada de la teoría de las limitaciones de los recursos que se están consumiendo y, entre ellos, los recursos energéticos son un ejemplo claro. La futura limitación de las fuentes de energía no renovables tiende a ser el caso citado como causa de alarma y preocupación por los autores pertenecientes a esta tradición.
La otra versión del movimiento ecologista es la que centra la causa del deterioro ambiental, no tanto en el crecimiento de la población, sino en el crecimiento de la utilización de tecnologías o sustancias tóxicas y contaminantes, que pueden sustituirse, independientemente del crecimiento de la población. Su máximo exponente es Barry Commoner que fue el fundador del movimiento ecologista progresista en EEUU y que, diferenciándose de la versión conservadora –que se caracterizó por su determinismo demográfico-, centró sus propuestas en el cambio y sustitución de los recursos y tecnología utilizados, cuestionando la inevitabilidad del deterioro medioambiental que Ehrlich consideraba como consecuencia del crecimiento demográfico. Barry Commoner mostraba la reducción del dióxido de carbono (resultado de sustituir el tráfico de mercancías por carretera por el de tráfico ferroviario, basado en la electricidad) como ejemplo de la reversibilidad del daño medioambiental. Barry Commoner no ponía el énfasis en el crecimiento demográfico sino en la utilización de productos que afectan negativamente al medioambiente y, por lo tanto, a la humanidad. La solución es encontrar sustitutivos a los productos contaminantes. La sustitución de la energía nuclear por las energías renovables como la solar es un ejemplo de ello.

30 de agosto de 2013

Decrecentistas, un esfuerzo más

3 de abril de 2013

Entrevista a Anselm Jappe en el dossier dedicado al decrecimiento en El Viejo Topo.

¿A qué atribuye usted el “boom” del discurso sobre el decrecimiento?

En realidad, la parte del público que actualmente es sensible al discurso del decrecimiento es aún bastante restringido. Sin embargo, esta parte está creciendo. Ello refleja una toma de conciencia frente a los desarrollos más importantes de los últimos decenios: sobre todo la evidencia que el desarrollo del capitalismo nos arrastra hacia una catástrofe ecológica y que no serán unos nuevos filtros o unos coches menos contaminantes los que resolverán el problema. Hay un recelo difuso incluso respecto a la idea de que un desarrollo económico perpetuo sea deseable y al mismo tiempo una insatisfacción con las críticas al capitalismo que reprochan esencialmente su distribución injusta de la riqueza o solamente sus excesos, como las guerras y las violaciones de los “derechos humanos”. El interés por el concepto de decrecimiento traduce la impresión creciente de que es toda la dirección del viaje emprendido por nuestra sociedad la que es falsa, por lo menos desde hace unos decenios. Y que estamos ante una “crisis de civilización”, de todos sus valores, también en el nivel de la vida cotidiana (culto al consumo, la rapidez, la tecnología etc.).

Hemos entrado en una crisis que es económica, ecológica y energética al mismo tiempo y el discurso sobre el decrecimiento considera todos estos factores en su interacción en vez de querer reactivar el crecimiento con “tecnologías verdes”, como lo hace una parte del ecologismo, o de proponer una gestión diferente de la sociedad industrial, como lo hace una parte de la critica heredera del marxismo.

El decrecimiento gusta también porque propone modelos de comportamiento individual que se pueden empezar a practicar hoy y aquí, pero sin limitarse a ellos, y porque redescubre virtudes esenciales como la convivialidad, la generosidad la sencillez voluntaria y la donación. Pero atrae igualmente por su rostro amable, que hace creer que se puede alcanzar un cambio radical con un consenso generalizado, sin atravesar antagonismos y evitando fuertes enfrentamientos. Se trata de un reformismo que se quiere auténticamente radical.

¿Cómo se sitúa usted en relación con los debates decrecentistas? ¿Le convencen sus análisis y propuestas?

El pensamiento del decrecimiento tiene sin duda el mérito de querer romper con el productivismo y el economicismo que constituyeron durante mucho tiempo el fondo común de la sociedad burguesa y de su crítica marxista.

29 de agosto de 2013

Vamos a contar mentiras

29/8/2013
   Dicen, que las mentiras tienen las patas muy cortas. Yo  tengo mis dudas sobre este punto de vista, por una razón.                                                                                                                       
Algunas mentiras se pueden perpetuar en el tiempo y ser descubiertas mucho después del momento en que se dijeron, o quizás nunca. Todo depende de cómo sea la mentira de creíble y de quien la diga.

En España, desde que se produjo el fin de la dictadura y se tramito la constitución -y aunque es verdad, que pasamos muchos años de estar sin poder hablar nada, a poner y a dictar leyes sobre todo, y algunas con más acierto que otras-, lo único que han hecho quienes nos han representado ha sido tapar agujeros a base de mentiras. Algunas de ellas, quizás hayan sido sin querer hacer daño, pero no por eso dejan de serlo. Lo cierto es, que desde entonces, todos los gobiernos nos han mentido, de una forma o de otra, pero nos han estado mintiendo. Prueba de ello, es todo lo que está saliendo a la luz y que no es precisamente de ayer, sino de hace muchos años atrás. 
En los programas electorales, yo diría que nos han mentido todos.

Con la entrada en Europa y la llegada del euro vino el resto.                                                
Al entrar en Europa y darnos tanto dinero como nos dieron para ponernos al día y dejar de ser tercermundistas, en este momento nuestros dirigentes se volvieron locos. Jamás habían visto tanto dinero junto -ni ellos ni ninguno de nosotros-, y quizás y con buena intención lo empezaron a repartir; entre autonomías, partidos, sindicatos, patronal, etc…

Pensaron que había suficiente para todos y para todo y aquí empezaron nuestros problemas. Podríamos no haber caído en ellos entonces de haber sido más cuidadosos, porque el dinero de Europa fue como el maná, pero se racionó mal. Empezaron a repartir a diestro y siniestro, eso sí, quedándose ellos con la mejor parte, como bien dice el refrán.

Los gobiernos, desde entonces y hasta hoy, nos han mentido. Y no quiero decir que no haya cosas buenas que nos han pasado, que las hay; hemos progresado mucho como país y somos gente trabajadora, pero si miramos la balanza, nos damos cuenta hasta que punto hemos sido engañados y cuáles son las consecuencias de tanta mentira imperdonable e innecesaria. 
No hacía falta mentir, lo que hacían falta eran humanos buenos y honestos, y no desalmados sin escrúpulos. 

¿Cómo hemos podido degenerar tanto?

Juan Tortosa - 29/8/2013
Pero ¿qué es lo que hemos hecho con aquella hermosa libertad incipiente que empezamos a gestionar en 1976 para que casi cuarenta años después parezca, no solo que no hemos avanzado nada, sino que vamos marcha atrás?
¿En qué nos hemos equivocado para que las cosas nos hayan salido tan mal?
¿Por qué las cárceles visitadas entonces por tantos políticos que luchaban por la democracia albergan ahora políticos y empresarios corruptos de toda calaña y condición (y lo que queda)?
¿Cómo es posible que no nos haya dado tiempo de poner nuestra casa, nuestro país, mucho más en orden de lo que está?
¿Qué es lo que hemos hecho tan mal? ¿tantas heridas cerramos en falso en su día? ¿tantos frentes quedaron abiertos?
¿Cómo es posible que sigamos tan polarizados, tan cainitas, tan crispados los unos con los otros?
¿Por qué tantos avances incuestionables nos han servido de tan poco?
¿Por qué. habiendo menos analfabetos que entonces, hay menos librerías, menos cines, menos eventos culturales que muevan y motiven a la gente como pasaba hace treinta años?
¿Por qué, a pesar de los avances sociales y económicos, no hablas con nadie que no le tenga mucho más miedo al futuro ahora que hace solo unos años?
¿Cómo es posible que cada día que pasa se batan récords históricos de solicitudes de ayuda a Cáritas y oenegés varias?
¿Por qué hay que volver a buscarse la vida (la supervivencia, no la prosperidad) en el extranjero?
¿Por qué jóvenes que crecieron viendo a sus padres ir a votar aparecen ahora por las esquinas levantando la mano cara al sol y enarbolando símbolos fascistas?
¿Por qué el país moderno que parecía que estábamos empezando a construir se asemeja más cada día que pasa al del casposo blanco y negro de los nodos franquistas?
¿Cómo es que no está enterrada y olvidada la liturgia fascista? ¿Quién y cómo se dedica a reavivarla? ¿Por qué?
¿A dónde vamos tan crispados? ¿Por qué nos enconamos tanto?
¿Por qué después de tantos años trabajando por el diálogo y el entendimiento tenemos a tanto energúmeno mediático vociferando en las ondas o redactando inflamables proclamas en infames pasquines?
¿Qué nos ha pasado? ¿Cuándo empezó la cuesta abajo?
¿Cómo es posible que hayamos degenerado tanto?

28 de agosto de 2013

¿Cómo se puede combatir la corrupción política en España?

David Page - 16/6/2013


Los españoles vuelven a considerar la corrupción como uno de los grandes problemas del país. Decenas de escándalos con políticos como protagonistas se han sucedido en los últimos años y parecen haber colocado a la sociedad en algún punto cercano al hartazgo. Una sensación acentuada en medio de una crisis económica que está haciendo sufrir a muchos ciudadanos (vamos ya por 6 millones de parados) y en la que los derroches y el enriquecimiento ilícito de los representantes públicos parecen aún más obscenos.

Según los últimos barómetros del CIS, un 40% de los españoles cita la corrupción entre los principales problemas del país y otro 30% señala a la clase política como un problema en sí misma. Unas magnitudes que muestran que la preocupación de la sociedad por la deriva de la casta política está ya muy cerca de los máximos que marcó a mediados de los noventa, cuando los escándalos asaltaban día a día las portadas de los diarios en el último gobierno de Felipe González. La longitud del listado de corruptelas de la España de hoy no le va a la zaga a la de antaño: Bárcenas, Gürtel, los ERE de Andalucía, caso Palau, Pallerols, caso Campeón, Brugal, Pretoria, caso ITV, Pokemon, Noós... Suma y sigue.

Más de 300 políticos españoles están hoy imputados por su presunta implicación en casos de corrupción. Según datos internos de la Agencia Tributaria, actualmente están en curso más de 1.500 casos e investigaciones sobre posibles actos ilícitos. Entre 2000 y 2010 un total de 676 municipios españoles se vieron afectados por diferentes casos de corrupción, un 8,3% del total, según el estudio Aproximación a una geografía de la corrupción urbanística en España [ver aquí].

Sin embargo, y pese a la aparente gravedad y extensión del problema, la corrupción parece salir casi gratis al político en las urnas y el castigo electoral al que están sometidos los sospechosos es cuanto menos muy limitado [ver ¿Por qué en España no se castiga la corrupción en las urnas?]. Y si el gran control de carácter vertical que tiene a disposición la ciudadanía (el voto) aparentemente no funciona para combatirla, los expertos proponen promover los controles horizontales para poner coto a la corrupción. Unas propuestas que pasan más por prevenir las corruptelas y desincentivar que se produzcan que por perseguirlas y castigarlas posteriormente (aunque también sea imprescindible hacerlo a posteriori).

Y es que el gran éxito de la lucha contra la corrupción no es tanto la detección de muchos escándalos y la aplicación de duras sanciones a los responsables, sino que resulta socialmente mucho más conveniente la prevención de estos casos y, en todo caso, su detección temprana para evitar que sus efectos económicos, políticos o ambientales acaben siendo irreversibles. Éstas son algunas propuestas para poner freno a ese fenómeno que tantos ciudadanos ven como uno de los grandes problemas de España.

27 de agosto de 2013

Parcelar el sol

23 agosto 2013 
Susana Merino – ATTAC Argentina
¿Cuánto tardaremos aún en parcelar el aire, la luz, el calor del sol, el agua del mar? ¿En ponerles precio y hacer que solo unos pocos privilegiados puedan habitar la faz de la tierra?
En esta enloquecida carrera hacia la mercantilización total del universo, la tierra, el agua, la vida… la imaginación humana no tiene límites, pero nos falta aún desarrollar algunas tecnologías que nos permitan incorporarle ciertos elementos que hasta ahora la madre naturaleza ha logrado escamotearle al comercial empecinamiento humano: el sol, el aire, la luz, los océanos, la estratósfera. Es cierto que en alguna pequeña medida hemos logrado domesticar a la luz reduciéndola a infinitesimales parodias del sol, en la llama de una vela o en la ampolla terminal de una fuente energética pero la luz y el calor, ese que hace fructificar las mieses, esa que pinta de colores inigualables los paisajes, la que vence a la oscuridad y nos permite descubrir que las cosas que nos rodean tienen formas y texturas insospechadas, esos son todavía inasibles e indivisibles y puede ser disfrutados por casi, casi todos los seres humanos.
Algo que no siempre es posible en otros órdenes de cosas. No hace mucho leí una frase que me sobrecogió, “los seres humanos son los únicos seres vivos que deben pagar para vivir” ¿Cuán cerca o cuán lejos estamos aún de lograr privatizar todo, todo lo que aún falta y el universo o Dios o el Supremo Hacedor han puesto a disposición de todos los seres humanos para garantizarles la existencia? ¿Cuánto tardaremos aún en parcelar el aire, la luz, el calor del sol, el agua del mar? ¿En ponerles precio y hacer que solo unos pocos privilegiados puedan habitar la faz de la tierra? ¿Acaso, no se han puesto ya en venta terrenos para el establecimiento de “countries” en nuestro satélite desde que la sonda LCROSS de la NASA descubrió yacimientos de agua en la luna? Y aunque también se hayan establecido límites marítimos y se hayan privatizado orillas del mar para realizar cultivos acuícolas, iniciativas que aceptamos como normales sin que intentemos siquiera cuestionarnos si es lícito o no, si es lógico o no, si es racional, si estamos comprometiendo o no cada vez más la vida toda de la humanidad.
Se ha definido al ser humano como un ser racional ¿qué significa entonces ser racional cuando comprobamos que los seres irracionales del planeta no se esmeran en destruirse recíprocamente sino en función de las necesidades vitales determinadas por la cadena trófica, como sí lo hacen los humanos entre sí y no precisamente por razones de subsistencia, sino por mucho más mezquinos y despreciables intereses?
Pareciera indispensable que nos detengamos a pensar pero no individualmente sino colectivamente, que reflexionemos con la convicción de que en ello nos va la vida, no la personal, sino la de la propia humanidad y las de las generaciones que ya están entre nosotros y a las que estamos condenando a un irreversible y fatídico futuro. Que difundamos y generalicemos la convicción de que ningún bien planetario, ninguno de los cuatro elementos es propio, privado, ni de nadie en particular, ni de individuos, ni de comunidades, ni de países, que los cuatro son patrimonio colectivo y que el usufructo personal de alguno de ellos debe hallarse subordinado al bien común y compartido por el conjunto de la sociedad ¿Utopía? Sí, puede ser pero por sobre todas las cosas una utopía que de no transformarse en objetivo y meta de la estirpe humana, puede generar males mayores como los que han venido acrecentándose en las últimas décadas y condenando a muerte a millones de seres inocentes de toda inocencia.

Mapa de los 63 pueblos donde se experimentan cultivos transgénicos

Tercera información - 29/6/2013


Según la asociación ecologista, España acogía ya en 2009 el 42% de todos los experimentos con transgénicos al aire libre realizados en la Unión Europea en los últimos años. Dicho de otra manera, nuestro país se ha convertido en el campo de pruebas favorito de las multinacionales.

Amigos de la Tierra ha hecho pública la localización exacta de los campos donde se ha solicitado experimentar con cultivos transgénicos en España en 2010, unos datos hasta ahora secretos.
Son en total más de cien parcelas repartidas en 63 municipios donde multinacionales como Monsanto, Syngenta, Bayer o Pioneer tienen planeado realizar experimentos con maíz, remolacha y algodón transgénico para ver qué tal funcionan. Amigos de la Tierra considera que los agricultores, vecinos y ayuntamientos tienen derecho a conocer su localización exacta, aunque resulte imposible poder protegerse de una contaminación genética e invisible cada vez más generalizada.

Decían que iban a respetar los espacios protegidos, pero era mentira. Varios experimentos de Monsanto con maíces transgénicos se encuentran en la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda, en Daimiel, mientras que Syngenta pretende probar fortuna con remolacha transgénica en una ZEPA (Zona Especial de Protección de Aves) de Castilla y León.

Según la asociación ecologista, España acoge el 42% de todos los experimentos con transgénicos al aire libre realizados en la Unión Europea en los últimos años. Dicho de otra manera, nuestro país se ha convertido en el campo de pruebas favorito de las multinacionales.

Hasta ahora la localización de los campos experimentales con transgénicos era confidencial. Pero una reciente sentencia del Tribunal Europeo de Justicia ha amparado el derecho a que esta información esté a disposición pública.

A continuación puedes ver un listado y un mapa de los municipios en los que se ha solicitado experimentar, el transgénico que se quiere cultivar y los datos para localizarlo (provincia, municipio, polígono y parcela). Si quieres situar la parcela exacta en un mapa, sólo tienes que introducir estos datos en el programa de identificación de parcelas agrícolas del Ministerio (SIGPAC)

Importante: El Ministerio facilita las parcelas propuestas inicialmente por las empresas, pero advierte de que luego suelen elegirse sólo algunas de ellas. Por lo tanto, lo que se recoge en este mapa son las previstas, no las finalmente utilizadas.
¿Aparece tu pueblo en la lista?
Además de estos ensayos experimentales, España sigue cultivando 76.000 hectáreas del maíz transgénico MON 810 de forma comercial, sin que tengamos posibilidad de saber dónde se cultivan ni dónde acaban. Otra razón más para que no me gusten los transgénicos. ¿Cuántas más hacen falta para poner fin a esta irresponsabilidad?


26 de agosto de 2013

Si hay brotes verdes ¿por qué no hay crédito?

220px-Druppelteller[1]Hasta no disponer de crédito la economía española se deslizará hacia el abismo, no hay vuelta de hoja todo lo demás son monsergas de la casta política para permanecer en sus poltronas apelando al espejismo de una visión de brotes verdes. Falta por ver que todas las campanas echadas al vuelo sobre el descenso del paro repiquen una vez pasado la estacionalidad del verano y la contratación al servicio del turismo. De lo que se tiene que hablar no se habla: de la morterada de millones entregados a la banca desde las escuálidas arcas del Estado, se dijo en un primer momento, que la perentoria necesidad se debía a una ofrenda al dios dinero para que retornara el crédito a las empresas y las familias españolas. Bien, ya ha pasado el suficiente tiempo para catalogar que la banca que jugaba en la Champions Ligue no ha abierto el grifo del crédito y el cuentagotas es la medida empleada. Una nueva mentira a la que añadir el curriculum de falsedades del gobierno de turno que persigue la simulación de un engaño perpetuo con tal de favorecer a sus amos, los que financian el partido y a la chita callando se van embuchando miles de euros que los hace vivir en un mundo aparte. Nos tendríamos que preguntar por qué demonios los bancos no ofrecen crédito, y por tan largo periodo, si es el combustible que hacer mover el motor de la economía. Una respuesta fácil sería que los bancos no disponen de la liquidez suficiente, otra por el estilo: los clientes están sobre endeudados y no tienen la capacidad de devolver lo que se les presta. Esta respuesta sería demasiado simplista por lo que se hace necesario retroceder en la moviola del tiempo para situarnos antes del trompazo de los bancos y sus primas las cajas de ahorro. Una vez agotados los depósitos de sus clientes, estas entidades financieras se lanzaron a una escalada de endeudamiento emitiendo cedulas hipotecarias y todo tipo de productos que colocaban en el mercado financiero y con el dinero obtenido volvían, una y otra vez, a repetir la operación: ofrecer al primero que se presentaba un préstamo hipotecario o un crédito para comprar un coche o ir de vacaciones. El dinero corría a raudales por los bancos.

25 de agosto de 2013

¿Podemos democratizar la economía?

Hagamos de la economía un espacio de empoderamiento en el cual seamos nosotros y nosotras quienes decidamos cómo queremos producir y consumir. Un espacio con una dimensión política, participativa y transformadora
Zona CríticaEconomistas Sin Fronteras - 19/8/2013
Sin duda, no es tarea fácil articular respuestas frente al ataque que las ciudadanas y ciudadanos estamos sufriendo en nuestros derechos y libertades como consecuencia de la aplicación de las políticas neoliberales. Unos derechos y libertades a los que nos referimos en un sentido amplio, es decir, hablamos tanto de derechos y libertades individuales como de derechos económicos y sociales.
Algunas de estas respuestas se han concretado en el nacimiento y desarrollo de movimientos como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca o las distintas mareas ciudadanas, que han realizado una labor importantísima de visibilización de aquellos puntos donde se desarrolla el conflicto: el derecho a una vivienda, la defensa de los servicios públicos, etc.
Por otro lado, en un clima en el cual se han revelado en toda su crudeza los obstáculos impuestos a la ciudadanía para acceder a espacios de participación políticos, muchas personas, colectivos y organizaciones han señalado con acierto al sistema de representación como uno de los "cooperantes necesarios" en la crisis actual. En este sentido, las respuestas pasan por conquistar esos espacios de participación, tanto a nivel estatal como, sobre todo, a nivel de la Unión Europea. Una construcción supranacional que, especialmente en materia de política económica, ha asumido importantes competencias que antes eran ejercidas por los Estados y que, en función de su arquitectura y las atribuciones correspondientes a sus distintos órganos (Comisión, Consejo, Parlamento Europeo y Tribunal de Justicia), puede adoptar decisiones sobre las cuales resulta difícil ejercer un adecuado control democrático.
Efectivamente, una de las frases más repetidas en las plazas, calles y manifestaciones es la de "lo llaman democracia y no lo es", y esta denuncia implica un debate sobre cómo hacer posible esa democracia real, esa participación de la ciudadanía en los asuntos públicos y en la toma de decisiones sobre cuestiones que nos afectan en nuestra vida cotidiana. En ocasiones, ese debate se establece desde planteamientos que pasan por la regeneración de las instituciones, y otras veces desde posturas que defienden un ejercicio de democracia directa con las mínimas delegaciones posibles.
Reconociendo la importancia de que exista un marco institucional desde el cual se impulsen, incentiven y doten de recursos a determinado tipo de políticas de contenido social, desde estas líneas queríamos hoy defender la importancia de la acción cotidiana de la ciudadanía como agente de cambio y, más específicamente, destacar algunas iniciativas que están alcanzando un considerable grado de desarrollo en el marco de la economía social y solidaria.

24 de agosto de 2013

Dimisiones y juicios

17 agosto 2013
Luis García Montero – Comité de Apoyo de ATTAC España
Como ciudadano, yo quiero dimisiones, no sólo juicios. Pero la política española está en los tribunales. Sea por un camino o por otro, el ejercicio de la autoridad pública acaba en manos de un juez. Por una parte, así lo impone la corrupción, el delito que debe ser perseguido; por otra, y con mucha frecuencia en España, está la costumbre de judicializar el debate político, desplazar con más o menos razón el conflicto de las ideas a los órganos judiciales. Como además esto sucede en un país que ha gremializado la Justicia en la rutina del clientelismo bipartidista, la consecuencia última es el empobrecimiento grave de la política, la manipulación de la soberanía popular.
¿Para qué sirve la política? La falta de respuesta clara es lo que extiende el descrédito de una actividad fundamental para cualquier democracia. Sólo a través de la política existe la soberanía civil. Renunciar a ella significa dejar de ser dueños de nuestro propio destino, acomodarnos a la fatalidad del tiempo hostil, dejar que las mentiras y los males de una nación se conviertan en una enfermedad crónica, confundir una Constitución con un Código penal.
La corrupción hace daño a la política. Pero en el caso de España, donde la corrupción afecta de forma cotidiana a las esferas más altas del Estado, se produce un efecto perverso. Sucede algo más que la indignación, algo más que la sospecha sobre la condición humana que acaba en los consabidos todos son iguales, todos son unos ladrones, todos se meten en política para robar… Lo raro de España no es que haya corruptos, sino que los afectados por los escándalos no dimitan o no se vean forzados a dar explicaciones claras e inmediatas. Casos de corrupción se producen en cualquier país. Lo que diferencia a España es la falta de vergüenza democrática, el desplazamiento de las responsabilidades políticas a la decisión de los tribunales.
La política queda así caracterizada como un ejercicio secundario y más bien insignificante. Si hay casos de corrupción en la Casa Real, la política sale dañada cuando el Parlamento no exige por unanimidad responsabilidades y una explicación transparente de las cuentas del rey y de su familia. La política sale también herida cuando el Presidente del Gobierno y la cúpula de su partido se ven envueltos en un caso de corrupción -en el hay ya más que indicios- y los ciudadanos sólo recibimos por respuesta el silencio o un argumentario de falsedades camufladas en el honor del jefe. La capacidad de resistencia en la vida pública de los afectados por los escándalos no habla aquí del poder de la política, sino de su minoría de edad, de su falta de responsabilidad. El protagonismo de las responsabilidades penales llena el hueco de algo todavía más importante para una democracia: la responsabilidad política.

Identificadas 20 causas genéticas de los cánceres más comunes

Javier Sanpedro - 14/8/2013

Un equipo internacional descubre que algunas ‘firmas’ son compartidas por muchos tipos de tumor y allana el camino para prevenirlos y tratarlos

Todos los cánceres se deben a mutaciones somáticas: alteraciones genéticas que por lo general no han sido heredadas, sino que han ocurrido en las células del individuo a lo largo de su vida. Una cuestión crucial es entender qué provoca esas mutaciones, y un consorcio científico internacional da hoy un gran paso al identificar 20 firmas mutacionalesdistintas en los cánceres humanos. Cada una de ellas representa un tipo de mecanismo responsable de generar las alteraciones genéticas, y su conocimiento “revela la diversidad de los procesos mutacionales que subyacen al desarrollo del cáncer”, según los científicos, y tiene implicaciones para la prevención y el tratamiento de este azote sanitario.
Algunas de esas firmas, o procesos mutacionales, están presentes en muchos tipos de cáncer, y otras son específicas de una clase u otra de tumor. Además, algunos de estos mecanismos de alteración genética se deben a la edad, otros a defectos en los sistemas de reparación y mantenimiento genómico, y otros a mutágenos ambientales como el tabaco (en el cáncer de pulmón) o la luz ultravioleta (en el cáncer de piel). Los datos también han revelado en muchos tipos de cáncer pequeñas regiones de ADN que sufren hipermutación, un grado de alteración muy superior al del resto del genoma.

Algunos procesos mutacionales son compartidos por muchos tumores
El consorcio implica a investigadores de 14 países y ha sido coordinado por Michael Stratton y sus colegas del Instituto Sanger, en Hinxton, Reino Unido. La contribución española está liderada por Elías Campo, del Hospital Clínic-IDIBAPS y la Universidad de Barcelona, y Carlos López-Otín, del Instituto de Oncología de la Universidad de Oviedo. Se trata de un trabajo exhaustivo en que los científicos han analizado el genoma de 7.042 tumores de todo tipo, que en total contienen nada menos que 5 millones de mutaciones.

23 de agosto de 2013

Genocidio cotidiano

Federico Mayor Zaragoza - 12 de agosto de 2013

Ahora, que ya sabemos, no podemos consentir que las asimetrías económicas se sigan incrementando, que los desgarros sociales y las situaciones de extrema pobreza lleven a la muerte a miles de personas al día en medio  de horrendos sufrimientos.

Y no puede consentirse que unos cuantos países, muy pocos, sigan empeñados en aplicar un sistema económico, político y social que ha fracasado rotundamente.

Y que pretendan que las Naciones Unidas sigan sustituyéndose por grupos oligárquicos de 6, 7, 8 o 20 países.

No: ahora ya no puede consentirse porque ya sabemos y porque ya podemos expresar nuestras propuestas y protestas.

Hay que iniciar sin demora el cambio que debe protagonizar el líder democrático de los EEUU, puesto que fueron los líderes republicanos los que cambiaron los valores democráticos por las leyes del mercado  y las Naciones Unidas por los grupos plutocráticos. Con Obama –que ha disminuido los gastos militares, ampliado la atención médica para todos e iniciado la recuperación económica norteamericana-  la mayor inversión de los Estados Unidos tenderá a asegurar  la hegemonía y estabilidad de los grandes países asiáticos, procurando especialmente la “contención” de China.
Los republicanos criticaron, como era de esperar, en diciembre de 2011, “la descomposición del tejido sociopolítico de los Estados Unidos”. Ahora están callados porque las medidas adoptadas por el Presidente están dando buenos resultados aunque, en cuanto puedan, volverán –el “gran dominio” militar, financiero, energético y mediático está en sus manos-  a formular los más sombríos presagios, tanto sobre la situación interna como externa.

También los conservadores han menospreciado los recientes acontecimientos, de extraordinaria importancia a escala mundial, que conducen a la emancipación de América Latina (CELAC).

Tampoco acertaron en las previsiones de “competencia internacional” en el suministro de combustibles porque, a los pocos meses, la Administración Norteamericana anunciaba que, en menos de diez años, siguiendo una política de gran incremento de energías renovables y de la obtención de gas por fracking, ¡los EEUU pasarían de ser importadores a exportadores!

Es imposible ahora imaginar que se cometan nuevamente dislates como la invasión de Irak basada en la mentira o la abominable “solución” aplicada a Libia a través de la OTAN. Millones de desplazados, miles de muertos y mutilados… pesan hoy sobre la conciencia de los “3 de las Azores” y la sociedad internacional debe movilizarse, presencial y virtualmente, para que no vuelvan a repetirse estos trágicos episodios.

22 de agosto de 2013

Martin Luther King, Jr. "Tengo un sueño"

Pronunciado: El 28 de agosto de 1963 delante del monumento a Abraham Lincoln en Washington, DC, durante una histórica manifestación de más de 200,000 personas en pro de los derechos civiles para los negros en los EE.UU.

Estoy orgulloso de reunirme con ustedes hoy, en la que será ante la historia la mayor manifestación por la libertad en la historia de nuestro país.
Hace cien años, un gran estadounidense, cuya simbólica sombra nos cobija hoy, firmó la Proclama de la emancipación. Este trascendental decreto significó como un gran rayo de luz y de esperanza para millones de esclavos negros, chamuscados en las llamas de una marchita injusticia. Llegó como un precioso amanecer al final de una larga noche de cautiverio. Pero, cien años después, el negro aún no es libre; cien años después, la vida del negro es aún tristemente lacerada por las esposas de la segregación y las cadenas de la discriminación; cien años después, el negro vive en una isla solitaria en medio de un inmenso océano de prosperidad material; cien años después, el negro todavía languidece en las esquinas de la sociedad estadounidense y se encuentra desterrado en su propia tierra.
Por eso, hoy hemos venido aquí a dramatizar una condición vergonzosa. En cierto sentido, hemos venido a la capital de nuestro país, a cobrar un cheque. Cuando los arquitectos de nuestra república escribieron las magníficas palabras de la Constitución y de la Declaración de Independencia, firmaron un pagaré del que todo estadounidense habría de ser heredero. Este documento era la promesa de que a todos los hombres, les serían garantizados los inalienables derechos a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad.

“Hay que trabajar menos horas para trabajar todos”

Serge Latouche, el precursor de la teoría del decrecimiento, aboga por una sociedad que produzca menos y consuma menos


Joseba Elola- Paris – 18/8/2013

Corría el año 2001 cuando al economista Serge Latouche le tocó moderar un debate organizado por la Unesco. En la mesa, a su izquierda, recuerda, estaba sentado el activista antiglobalización José Bové; y más allá, el pensador austriaco Ivan Illich. Por aquel entonces, Latouche ya había podido comprobar sobre el terreno, en el continente africano, los efectos que la occidentalización producía sobre el llamado Tercer Mundo.
Lo que estaba de moda en aquellos años era hablar de desarrollo sostenible. Pero para los que disentían de este concepto, lo que conseguía el desarrollo era de todo menos sostenibilidad.
Fue en ese coloquio cuando empezó a tomar vuelo la teoría del decrecimiento, concepto que un grupo de mentes con inquietudes ecológicas rescataron del título de una colección de ensayos del matemático rumano Nicholas Georgescu-Roegen.
Se escogió la palabra decrecimiento para provocar. Para despertar conciencias. “Había que salir de la religión del crecimiento”, evoca el profesor Latouche en su estudio parisiense, ubicado cerca del mítico Boulevard Saint Germain. “En un mundo dominado por los medios”, explica, “no se puede uno limitar a construir una teoría sólida, seria y racional; hay que tener un eslogan, hay que lanzar una teoría como se lanza un nuevo lavavajillas”.
Así nació esta línea de pensamiento, de la que este profesor emérito de la Universidad París-Sur es uno de los más activos precursores. Un movimiento que se podría encuadrar dentro de un cierto tipo de ecosocialismo, y en el que confluyen la crítica ecológica y la crítica de la sociedad de consumo para clamar contra la cultura de usar y tirar, la obsolescencia programada, el crédito sin ton ni son y los atropellos que amenazan el futuro del planeta.
El viejo profesor Latouche, nacido en 1940 en la localidad bretona de Vannes, aparece por la esquina del Boulevard Saint Germain con su gorra negra y un bastón de madera para ayudarse a caminar. Hace calor.

*** Fort Apache ***

-- Derechos Humanos --

-- Libia, el infierno de la migración africana --

-- La Carta de la Tierra --

La Dictadura del Hambre-Los Bilderberg-Cidinha Campos-Mayor Zaragoza-José María Gay-El Chojin

Music for all

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Hierbas, Plantas, Especias (Medicinales y Culinarias), y alimentos poco sanos

-- Por qué no estalla una Revolución --

"La información ya no tiene relevancia"

Estos últimos años se han hecho públicas informaciones de todo tipo que deberían haber dañado la estructura del Sistema hasta sus mismísimos cimientos y sin embargo la maquinaria sigue intacta, sin ni tan solo un arañazo superficial. Y esto pone de manifiesto un hecho extremadamente preocupante que está sucediendo justo ante nuestras narices y al que nadie parece prestarle atención. El hecho de que SABER LA VERDAD YA NO IMPORTA.

Parece increíble, pero los acontecimientos lo demuestran a diario. La información ya no tiene relevancia.

Nuestro cerebro se ha convertido en un drogadicto de la información rápida, en un yonqui ávido de continuos chutes de datos que ingerir, a poder ser pensados y analizados por cualquier otro cerebro, para no tener que hacer el esfuerzo de fabricarnos una compleja y contradictoria opinión propia. Porque odiamos la duda, pues nos obliga a pensar, ya no queremos hacernos preguntas, solo queremos respuestas rápidas y fáciles. Somos y queremos ser antenas receptoras y replicadoras de información, como meros espejos que rebotan imágenes externas, pero los espejos son planos y no albergan más vida en ellos que la que reflejan proviniendo del exterior.

Para emprender una transformación profunda de nuestro mundo, para iniciar una auténtica Revolución que lo cambie todo y nos lleve a una realidad mejor, deberemos descender hasta las profundidades de nuestra psique, hasta la sala de máquinas, donde están en marcha todos los mecanismos que determinan nuestras acciones y movimientos. Ahí es donde se está dirimiendo la auténtica guerra por el futuro de la humanidad. Nadie nos salvará desde un púlpito con brillantes proclamas y promesas de una sociedad más justa y equitativa, nadie nos salvará sólo contándonos la supuesta verdad, ni desvelando los más oscuros secretos de los poderes en la sombra.

Es pura lógica: No hay revolución posible sin una transformación profunda de nuestra psique a nivel individual, porque nuestra mente está programada por el Sistema. Y por lo tanto, para cambiar ese Sistema que nos aprisiona, antes debemos desinstalarlo de nuestra mente.

http://economiazero.com/por-que-estalla-una-revolucion/

-- Todo lo que deberías saber sobre el Fracking --

--- La mayor estafa de la historia de España se llama Electricidad ---

-- Plataforma en Defensa de la Libertad de Información --

-- Casos Aislados --

La Ley es todo. Nuestras leyes nos retratan y definen lo que somos en convivencia

La Ley es todo. Nuestras leyes nos retratan y definen lo que somos en convivencia
En el año 1985 un drástico cambio legislativo atribuyó al Parlamento la elección de todos los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)

--- Las empresas del IBEX35 bajo lupa ---

El paro y la precariedad no son problemas individuales, son problemas colectivos

-- Jean Ziegler - Vicepresidente de la ONU --

“No puede ser que en un planeta con los recursos agroalimentarios suficientes para alimentar al doble de la población mundial actual, haya casi una quinta parte de sus habitantes sufriendo infraalimentación”.

“La hambruna ya es una realidad en las banlieues parisinas y el pueblo español también está sufriendo la pobreza, como el resto de Europa”.

Los teóricos del neoliberalismo, “nos han hecho creer que hoy en día la austeridad es la única política posible, pero sólo se aplica a la clase trabajadora y nunca a los banqueros.

El neoliberalismo delictivo, “se cura con política”.

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-- Compromiso de todos --

-- Olivier de Schutter - Relator de la ONU --

“Con la comida que se tira podrían alimentarse 2.000 millones de personas”

”La mitad del cereal producido en el planeta es para satisfacer la demanda de consumo de carne. Hay un sobreconsumo de carne absolutamente insostenible”

http://esmateria.com/2014/04/25/con-la-comida-que-se-tira-podrian-alimentarse-2-000-millones-de-personas/

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-- El beneficio de los alimentos naturales --

*** Parada obligatoria ***